Un año después del asesinato de los Alpes, la Gendarmería francesa ha publicado un retrato robot del motorista que presuntamente acabó con la vida de tres miembros de una familia británica de origen iraquí y de un cliclista francés, al sur del lago Annecy, en Francia.

Según varios testigos que vieron a un motorista en la zona del crimen aquel día, éste llevaba perilla, y un casco oscuro poco habitual, que permite destapar la boca sin necesidad de quitárserlo.

Por otra parte, la policía ha entregado este fin de semana un documento a los jueces que da por hecho que sólo hubo un tirador, y que utilizó un arma de coleccionista del Ejército suizo.

Todas las hipótesis siguen abiertas, aunque la de una disputa por dinero ha cogido fuerza desde que los servicios secretos alemanes descubrieran que Al Hili, el padre de familia asesinado, figuraba entre los herederos del exdictador Sadam Hussein. Al Hili finalmente fue eliminado de la lista de beneficiarios.